No fue de ninguna manera un partido redondo de los Rams en su compromiso con los Seahawks: 31 puntos permitidos, 273 yardas por carrera en contra y 10 penalidades para 102 yardas de castigo son algunos de los datos que así lo retratan.
Pero si por algo será recordado el juego de la semana 10 de la temporada de 2018 del equipo carnero es por las más de tres horas de diversión y entretenimiento culminadas con victoria, durante una de las semanas más trágicas de tiempos recientes en el sur de California.
El receptor Brandin Cooks anotó en una carrera de 9 yardas momentos después de que el linebacker Dante Fowler Jr. provocó un fumble que él mismo recuperó, para una ventaja de 12 puntos que fue irreversible y Los Ángeles derrotó a Seattle 36-31.
El emotivo triunfo ante 72,755 espectadores en el Memorial Coliseum mejora el récord de los Rams a 9-1 previo a su duelo en la cumbre del siguiente lunes por la noche contra los Kansas City Chiefs (9-1) en la Ciudad de México, en lo que será un choque de locomotoras entre los dos mejores equipos de la temporada.
Los Rams ahora tienen cinco ganados más y cuatro perdidos menos que los Seahawks (4-5), por lo que la División Oeste de la NFC está en la bolsa a pesar de que aún hay mucho camino por delante. L.A., al mismo tiempo, protegió su ventaja en la conferencia sobre New Orleans (8-1).
Domingo solemne y emotivo
Los Rams llegaron al juego del domingo listos para honrar a los veteranos militares y con la idea de reponerse de su primera derrota, sufrida justamente ante los Saints. No fue sencillo, porque la defensa de los Rams sigue luciendo vulnerable, además de que los devastadores acontecimientos de la semana en el área de Los Ángeles –el tiroteo en Thousand Oaks y los poderosos incendios– se convirtieron en posibles factores de distracción para el equipo.
La tragedia acumulada ameritó un momento de silencio antes del kickoff inicial del partido, el cual fue disputado con muy aceptable calidad de aire en la zona centro-sur de L.A.
El ala cerrada Gerald Everett tuvo el primer touchdown de su carrera jugando en el Memorial Coliseum y el estelar Todd Gurley se escapó en carrera de 17 yardas para llegar a 13 juegos consecutivos logrando al menos un touchdown, mientras los Rams se iban al medio tiempo con ventaja de 17-14.
Pero el equipo visitante tomó la delantera en el tercer periodo con un pase de Russell Wilson de 23 yardas a Tyler Lockett, quien luego caminó hacia la suite a nivel de cancha ocupada por Floyd Mayweather Jr. detrás de la zona de anotación, y le regaló el balón al legendario boxeador. El juego estaba 21-20 y los Rams iban a tener que venir de atrás.
Cabe mencionar que ese touchdown de Seattle llegó dos jugadas después de que Dante Fowler Jr. mantuvo viva la serie al cometer un costoso castigo de conducta antideportiva, cuando los Seahawks ya habían sido detenidos. Él dijo que lo sancionaron por decirle a un árbitro que había hecho una marcación "terrible", algo que, prometió, no volverá a suceder.
Fowler se saca la espina
Los Rams recuperaron la delantera gracias al pase de 10 yardas de Jared Goff al otro ala cerrada, Tyler Higbee, de 10 yardas a principios del cuarto periodo (26-21). Tras intercambiar goles de campo el marcador era 29-24 a favor de L.A. y es cuando se produjo la jugada clave de la tarde.
En 3ª oportunidad sobre su yarda 32, el quarterback Wilson buscaba receptor cuando Fowler Jr. le llegó por detrás para golpearle el brazo y causar un balón suelto. Tras fallar Wilson en recogerlo, el ovoide siguió rodando y el propio Fowler lo tomó en la yarda 9 de los Seahawks restando seis minutos de partido.
A la siguiente jugada, Goff, en otro partido muy bueno (28 de 39 pases, 318 yardas, 2 TDs) le entregó el balón a Cooks en una corrida tipo "jet sweep", es decir, con el receptor en movimiento por delante del quarterback, y Cooks se coló por la esquina derecha de las diagonales, poniendo a los Rams arriba por dos posesiones (36-24).
Cooks, quien fue el mejor receptor del partido con 10 atrapadas para exactamente 100 yardas, no pudo resistirse y también le regaló el balón a "Money" Mayweather, localizado muy cerca y quien luego posaba junto a sus amigos con sus dos nuevos ovoides en un domingo de NFL para el controvertido peleador.
La gran acción defensiva de Fowler para el solitario balón recuperado del partido fue capitalizada y al final marcó la diferencia.
"Sabía que tenía que echarme el equipo en la espalda, regresar al campo y redimirme", dijo el linebacker exterior a propósito de aquel costoso castigo que había cometido y su posterior acierto. "Y mostrar a los coaches que ellos pueden confiar en que puedo hacer jugadas grandes y que puedo mantener la compostura, incluso cuando cometo un error".
McVay demanda cabeza fría
Seattle no se rindió y descontó faltando 1:56 minutos en un pase de 3 yardas de Wilson (17 de 26 pases, 176 yardas, 3 TDs) al corredor Mike Davis para el marcador final de 36-31. Pero el partido se definió más adelante, porque la defensa de Seattle detuvo en tres jugadas a los Rams mientras utilizaba sus tiempos fuera y Wilson inició la serie final en su yarda 25 y con 1:24 minutos.
Los Seahawks lograron llegar a la 35 del otro lado, pero en 4ª oportunidad y 10 por avanzar, el pase de Wilson fue impreciso debido a la presión de Aaron Donald, quien tuvo otro gran encuentro, esta vez con 2.5 capturas.
Donald llegó a 12.5 capturas en la temporada para recuperar el liderato de la NFL y de paso romper el récord de la franquicia de los Rams para un tackle defensivo en una campaña, el cual estaba en poder de D'Marco Farr, quien ahora es reportero y analista del club.
"Significa mucho. Ha habido mucha tragedia que nos ha afectado incluso a nosotros, que tuvimos que evacuar, y ganar un juego como este que es un duelo divisional puede darle a la gente un poco de sonrisas", dijo Donald, quien en la última serie de Seattle perdió la cabeza tras ser golpeado cuando ya estaba fuera del campo tras regresar un fumble de Wilson.
La jugada fue invalidada al marcarse pase incompleto, pero tanto Donald como Justin Britt, centro de los Seahawks, fueron sancionados con rudeza innecesaria por el altercado.
El entrenador Sean McVay valoró la tenacidad de sus Rams para sacar el triunfo, pero al hablar con los reporteros se mostró molesto por algunas penalidades como aquélla de Fowler y la de Donald.
"Estoy muy complacido por la manera en que ellos encararon esta semana, la manera en que respondieron ante verdadera adversidad en la vida, y estuvieron listos para jugar", dijo McVay. "Pero estoy más interesado en cómo manejamos los eventos que ocurren durante el curso del partido y nuestra habilidad para controlar nuestros impulsos y no derrotarnos a nosotros mismos".
Además de Goff y Cooks, otro carnero que se destacó fue Gurley con 120 yardas en 16 intentos para llegar a 988 en la temporada, además de su touchdown total No. 17, líder de la NFL en ambos renglones.
Whitworth, gigante generoso
Aunque no tuvo su mejor partido, fallando en protección de pase algunas veces, el tackle izquierdo de los Rams, Andrew Whitworth, dejó una nota muy alta el domingo al confirmar un gesto de la más alta calidad humana.
Whitworth, uno de los integrantes de los Rams más activos en labores de ayuda a la comunidad, dijo que su cheque correspondiente al juego contra Seattle será donado para ayudar a las familias de las 12 víctimas inocentes del tiroteo del pasado 7 de noviembre en un bar de Thousand Oaks, a través del Fondo para las Víctimas de Conejo Valley de la Fundación de la Comunidad del Condado Ventura.
"Honestamente, le envié un texto a mi esposa ese día y le dije: 'Hemos sido bendecidos por este deporte y millones de cosas han sido tan increíbles que estoy feliz de ser parte de esto", dijo el tackle al final del partido. "No se acaba aquí, vendrá más. Estos incendios y todo lo demás, hay mucho más que nosotros podemos hacer como gente. Creo que es importante".